Novena del Sagrado Corazón de Jesús
Las oraciones del Sagrado Corazón de Jesús nos fueron dadas por Jesucristo mismo. Por lo tanto, estas oraciones son algunas de las más poderosas que existen de este lado del Cielo. La verdad es que nunca se reza lo suficiente ni se conocen demasiadas oraciones. Como exhorta la Escritura: “Orad sin cesar…” (1 Tes. 5:17); “…en el Espíritu en toda ocasión con toda clase de oraciones y peticiones…” (Ef. 6:18); “Cuando me llaméis y vengáis a orar a Mí, Yo os escucharé” (Jer. 29:12). Además, y como dice la expresión, “La oración humilde es la llave del Cielo; mientras que la fe abrirá la puerta”.
Oh Santísimo Corazón de Jesús, fuente de toda bendición,Te adoro, Te amo, y con vivo dolor de mis pecados,Te ofrezco este pobre corazón mío.Hazme humilde, paciente, puro y enteramente obediente a Tu voluntad.Concédeme, buen Jesús, vivir en Ti y para Ti. Protégeme en medio de los peligros,consuélame en mis aflicciones,dame la salud del cuerpo,la ayuda en mis necesidades temporales,tu bendición en todo lo que hago y la gracia de una muerte santa.En tu Corazón pongo todos mis cuidados.En cada necesidad déjame acudir a Ti con humilde confianza diciendo:’Corazón de Jesús, ayúdame’Amén.
Memorare
Esta práctica de oración católica tiene probablemente su origen en la “primera novena” recogida en los Hechos de los Apóstoles. Antes de que Jesús ascendiera al Cielo, los discípulos se reunieron para preguntarle sobre la restauración de Israel. Jesús les dijo: “No os corresponde a vosotros saber los tiempos o las sazones que el Padre ha establecido por su propia autoridad. Pero recibiréis poder cuando venga sobre vosotros el Espíritu Santo, y seréis mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaría, y hasta los confines de la tierra” (Hch 1, 7-8).
Así que los discípulos y María esperaron juntos, rezando para que el Espíritu Santo les guiara. Finalmente, nueve días después, el Espíritu Santo descendió sobre ellos. “Cuando se cumplió el tiempo de Pentecostés, estaban todos juntos en un mismo lugar” (Hch 2, 1). Cuando los discípulos oraron juntos durante nueve días por la venida del Espíritu Santo, modelaron el método de oración de la novena, tan popular hoy en día.
A muchos santos y otras personas santas les fueron reveladas novenas por Cristo o la Virgen María. Por ejemplo, Cristo reveló la Novena de la Entrega al Padre Dolindo Ruotolo (1882 – 1970), ahora candidato a la beatificación, para guiarnos en el crecimiento de nuestra confianza en Dios – para entregarnos a Él. María reveló la Novena de los 54 días a una joven que padecía una enfermedad que se creía incurable; esta oración de 54 días consta en realidad de 6 novenas.
Oración a San Miguel
Oh Corazón santísimo de Jesús, fuente de toda bendición, te adoro, te amo y, con vivo dolor de mis pecados, te ofrezco este pobre corazón mío. Hazme humilde, paciente, puro y totalmente obediente a tu voluntad. Haz, buen Jesús, que viva en Ti y para Ti. Protégeme en medio del peligro; consuélame en mis aflicciones. Dame salud corporal, ayuda en mis necesidades temporales, tu bendición en todo lo que haga y la gracia de una muerte santa. Amén.
La Oración del Sagrado Corazón de Jesús es una de las oraciones más populares al Sagrado Corazón de Jesús. Se puede encontrar en estampas, páginas web y escrita en los corazones de hombres, mujeres y niños de todo el mundo. Tardé unos meses en memorizarla, recitándola cada mañana mientras llevaba a mis hijos al colegio.
Después de ocho años de educación en casa, decidí dar un gran salto y llevarlos a la escuela católica, y fue al Sagrado Corazón a donde acudí en busca de fuerza y guía. Por aquel entonces, la llamaba mi “oración de la escuela católica”, ya que la rezábamos todos juntos en el coche de camino al colegio. Sabía que necesitaba una oración que no sólo protegiera a mis hijos, sino que nos guiara a todos, y esta oración era la perfecta. En sólo unos meses, todos la habíamos memorizado. El corazón de Jesús es lo suficientemente grande para todos nosotros y para todas nuestras intenciones.
Oración a san josé
La novena, una forma devocional de oración. Una novena es un período de nueve días consecutivos de oración intensificada. Una novena puede ofrecerse como preparación para una fiesta importante, como Pentecostés, para profundizar en la devoción a Jesús, para honrar a un santo en particular o para pedir una gracia o favor especial. Una novena puede ser ofrecida por toda la Iglesia, por una comunidad particular o por un individuo. El término deriva de la palabra latina novem que significa “nueve”.
La base bíblica de una novena. La práctica de ofrecer una novena se basa en los nueve días que la Santísima Virgen María y los apóstoles pasaron en Jerusalén desde la Ascensión hasta Pentecostés en preparación orante para la Bajada del Espíritu Santo. El Tiempo Pascual dura cincuenta días. Jesús ascendió al cielo cuarenta días después de la Resurrección (ver Hechos 1:3), lo que deja diez días. Poco antes de su Ascensión, Jesús “les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen… [porque] dentro de pocos días seréis bautizados por el Espíritu Santo” (Hch 1,4.5). En consecuencia, “fueron al aposento alto …. [y se dedicaron unánimes a la oración” (Hch 1,13.14). Rezaron durante nueve días y el décimo fueron llenos del Espíritu Santo.